sábado, 12 de julio de 2014

~Preparacoión~

Tras unas largas horas de "esto, esto, esto...", "te queda bien", "no", "rosa", "ni muerta", "vestido", "te mato"... Luna y Ginny consiguieron encontrar algo que me gustase, algo sencillo, una blusa granate y unos jeans. No suelo arreglarme nunca, así que...
-Genial, solo falta el calzado-dijo Luna. 
-¿Altos?-Ginny me miró. 
-Planos-contesté.
-¡Oh, venga! 
-Planos-repetí. 
Las chicas bufaron y me trajeron unos zapatos planos de tela negra. 
-Maquillaje-dijo Ginny. 
-No-contesté. 
-Me pones de los nervios ___. 
-No me arreglo nunca. 
-Ya es hora de que te arregles-contestó Ginny. 
-Déjala, yo creo que está bien.
-¡Gracias Luna!-grité.
-Tengo que irme chicas. 
-Te acompaño-dijo Luna. 
Cogí mi varita y la guardé entre mis pantalones y la blusa. Salimos del dormitorio de las chicas para pasar a la sala común de Gryffindor. Abajo estaban Ron, Hermione, Neville, los gemelos, Ron, Harry, y algún que otro alumno cuyo nombre no sabía aún. 
-Wow-dijo Neville asombrado viniendo a abrazarme. Respondí a su abrazo. 
-Estas preciosa-dijo Hermione. 
-Neville, ___ es bastante cabezota, ¿lo sabías?-Ginny bajaba las escaleritas. 
-Si, algo he oído-me miró. Rodé los ojos. 
-Tenemos que irnos-dijo Luna, yo le sonreí. 
-Ten cuidado-dijeron todos los chicos a la vez, sorprendiéndome. 
-Vale, de los gemelos lo entiendo, pero que todos vosotros digáis algo exactamente igual a la vez asusta-dije riendo. 
-___...-Dijo Neville. 
-Creo que se defenderme-dije ya más seria.- Tranquilo, yo tampoco me fio de nadie.-levanté un poco la blusa dejando ver parte de mi varita. 
Neville sonrió. 
-Ten-Harry me tendió algo. Lo cogí dudando.-Por si acaso. Snape patrulla por las noches, como te pille merodeando por los pasillos... 
-¿Qué se supone qué es?
-El mapa del merodeador-dijo Fred...o George... 
-Te indica algunos pasadizos y a las personas-contestó el otro. 
-No hay nada-dije. 
-Para abrirlo, tienes que poner sobre la "portada", por así decirlo, tu varita y decir...-El que hablaba puso su varita y ambos hablaron a la vez- "Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas".
El mapa empezó a dibujarse. "Los señores Lunático, Colagusano, Canuto y Cornamenta, proveedores de artículos para magos traviesos, se enorgullecen de presentar el Mapa del Merodeado" apareció junto al emblema de Hogwarts. 
-Wow-dije yo esta vez. 
-Y para cerrarlo, solo hay que decir... ¡Travesura realizada!-Dijeron ambos. Levanté la mirada para mirarles, me estaban mirando mientras sonreían y noté algo extraño 
-Gracias-dije riendo. 
-No se dan señorita-dijo uno. 
-Vamonos-dijo Luna. 
-Adios-me despedí de todos y me fui con Luna.


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Holaa, siento haber tardado tanto, si todavía hay alguien que me lee, me gustaría que comentase y esas cosas, gracais :* <3

lunes, 23 de diciembre de 2013

~Bajo presión~

"Te he observado desde que entranste en Hogwarts y... me gustaría conocerte. ¿Saldrías conmigo esta noche? A media noche en la puerta del comedor. -Zac"
-Vaya, has ligado-dijo Neville sonriéndome
-Y con un buen chico...-aseguró Ginny
-¿Vas a ir?-preguntó Hermione
-¿Cuándo has llegado?-preguntó Ron
-Hace un rato-contestó la chica
-No se Hermione, no le conozco...
-Luna creo que si le conoce, puede hablarte de él-dijo Neville
-No se...
-Dejadla, si no quiere que no vaya-dijo Ginny
-De momento no creo que vaya-Zac se giró a mirarme y me sonrió, le devolví la sonrisa.
-Chicos, tenemos que irnos ya...-dijo Hermione a Harry y a Ron
-¿Qué estáis tramando?-preguntó el pelirrojo de mi derecha
-Nada-contestó Ron
Los tres se fueron.
-Me asustan...-dijo Ginny
-A ti a todos-dijo Neville
-Venga, no deben de ser tan malos...-dije
-No es eso, pero si se les mete algo en la cabeza no paran hasta conseguirlo-dijo George
-Eso mísmo dice mamá de vosotros dos-dijo Ginny refiriéndose a los gemelos
-Bueno, somos familia-dijo Fred
-Luna, tú conoces a Zac, ¿verdad?-preguntó Neville
-Si, ¿por qué?-dijo la chica tranquilamente
-___ y él han quedado esta noche...
-Neville, yo no he dicho que vaya a ir-interrumpí
-Venga, no seas así-dijo Ginny- es un buen momento para conocerle.
-Ni siquiera sé como se apellida-dije
-Eso no importa-contestó la pelirroja
-Además, si me ha visto desde que entré aquí, ¿por qué no se me ha acercado a hablar?
-Tal vez fuese tímido...-dijo Neville
-Neville, tú y yo sabemos que esa excusa no tiene ni pies ni cabeza-dije
-Él es muy tímido-dijo Luna- pero es muy buena gente, venga, Ginny tiene razón, por intentarlo no pasa nada...
-Dejadla, si no quiere ir que no valla-dijo Fred
-Gracias, al fin alguien que me apoya
-Vengaaaa, te lo pasarás bien-dijo Neville. Cambió su gesto de la cara por otro un poco más serio- Sé que lo necesitas...
Suspiré.
-Está bien, pero la última vez que me hacéis pasar por algo así-dije sonriendo.
-Bien, Luna, esta tarde antes de que nos encerremos en los dormitorios hay que prepararla-dijo Ginny. La rubia sonrió. Rodé los ojos.
-Me voy a pociones chicos, nos vemos luego-sonreí y me fui.
Esta noche tendría una cita con un chico al que no conocía absolutamente de nada.

sábado, 10 de agosto de 2013

~Conociendo Gente~

En el comedor, me senté entre Neville y Ron y enfrente de Ginny.
-Te echaba de menos-dijo Neville
-¡Y yo a tí!
-Vaya, el rarito ha hecho una amiga nueva-me giré y vi a un chico de pelo rubio, bastante rubio.
-Piérdete Malfoy-dijo Ron
-Weasley, guarda tus zarpas o te harás daño-dijo el chico
-Cierra la boca o te la parto-dije. Los que estaban a mi lado me miraron
-Chica rebelde, no recuerdo haberte visto nunca por aquí
-Yo a tí si-dije, aunque no querría acordarme. Me lo ha hecho pasar muy mal en Hogwarts. Pero ahora tengo bastante valor como para dejarme pisotear por él.
-Me hubiera acordado de tí nada más verte...-puso cara pícara.
-Draco, o la dejas en paz o te tragas una pastilla vomitiva-dijo un chico poniéndose en mi campo de visión.
El chico rubio se cayó y miré hacia Ginny. Noté que Ron y Neville se separaban de mi y dos individuos se sentaban a mi lado.
-Hola de nuevo-dijo el chico de mi derecha
-Soy Fred-dijo el de mi izquierda- Y el es George
-Encantado-dijo el otro con un trozo de pollo en la boca
-Vale, sois familia de Ron, de eso no cabe duda. Pero lo que me extraña es que lo seais de Ginny-dije
-Si, eso también me extraña a mi-dijo la chica
Ambas sonreímos.
-Hemos visto cómo le has "plantado cara" a Draco, no sabía que fueses así-dijo...eeemm...¿Fred?
-Yo no era así Fred...
-George-me interrumpió
-George-me corrregí- He cambiado mucho, no sabía que esto sentaba tan bien
-¿Cómo es que no te hemos visto por aquí nunca?-preguntó Fred
-Oh, seguro que me habéis visto, pero no me habéis prestado atención, yo...
Fui interrumpida por un ruido ensordecedor que conocía muy bien. El correo. Todos miramos hacia el techo mientras las lechuzas venían con el contenido en las patas. Empezaron a pasar sobre nosotros y dejaron caer un paquete enfrente de... emmm...Fred.
-Es de papá-dijo. George se incorporó sobre mí un poco quedando cerca de mi cara y guiñándome un ojo.
-¿Qué dice?-preguntó
-"Chicos, espero que hayáis llegado bien. Me gustaría que conociéseis a alguien, es muy buena persona. Os envío a Pigwidgeon con una foto suya, Errol ya está muy mayor para cargar con más peso, por favor, tenéis que conocerla. Atentamente, Papá"-leyó en voz alta.
Escuchamos que un ruido proveniente de una lechuza que se había posado sobre la mesa.
-¡Hey! Hola pequeño-hizo intención de picarme pero se paró de golpe- Esta vez lo he dicho bien-le sonreí, él se acercó.- ¿Cómo tienes la cabecita? ¿Te has vuelto a dar con alguna cosa?-le acaricié.
-Se choca con todo-dijo George se parándose de mí.
-¿Es vuestra?-pregunté
-Sí, es Errol, el pobre no para de darse golpes. ¿Cómo es que conoces a nuestra lechuza?-preguntó Fred
-Él me llevó mi carta de Hogwarts-dije
Errol se separó de mí y se colocó detrás de un paquete.
-Creo que eso es tuyo-dijo George
Estiré la mano y cogí el paquete. Lo abrí y saqué una carta y algo unvuelto en un pañuelo violeta. "Hola ___, espero que todo esté bien por la escuela. Seguramente conozcas ya a Fred y a George, dos de mis hijos. Te envío esto para que estés "a salvo" de algunas de sus bromas pesadas, por si se pasan contigo. Dentro del pañuelo hay un botecito con una poción "de castigo". Si se pasan, echales una gotita en cualquier parte del cuerpo y empezara a salirles un salpullido. Se les pasará en unas horas, es solo para que aprendan, o al menos lo intenten. Úsalo cuando lo necesites. Atentamente, Arthur." Guardé la nota bajo la túnica y seguido, guardé también el bote.
-¿De quién es?-perguntó Fred
-De un amigo-contesté sonriéndo. Nadie me había enviado una carta en lo que llevo en la escuela.
-¡Fred! ¡Ahí viene Pigwidgeon!-gritó George
La lechuza dejó caer un sobre y ella y Errol se fueron volando.
-Ábrelo-dijo George poniéndose otra vez en la mísma postura de antes.
-George, la vas a aplastar-dijo Ginny
-No estoy apoyado en ella. ¿Mamá os ha enviado algo?-preguntó a los dos hermanos
-A mí algo de ropa-dijo Ginny
-A mí pijamas-dijo Ron desilusionado- ¿Qué es eso?-preguntó acercandose a los gemelos
-Una foto de alguien-contestó Fred
-Ábrela- Fred la vio y se quedó sorprendido
-¿Quien es?-preguntó Ginny
-No lo sé, nunca la he visto, ¿y tu Freddie?-preguntó George
-No
-Es...-dijo Neville. Le miré
-¡___!-interrumpió Seamus acercándose a nosotros
-¿Qué pasa Seamus?-pregunté
-Zac me ha dado esto para tí-me dio una nota
-¿Quién es Zac?-pregunté
-Ese chico de Ravenclaw-señaló a un chico de pelo rubio y ojos verdes que me estaba mirando. Me saludó con la mano y le devolví el gesto.
-Es mono-me dijo Ginny sonriéndo. Reí. Parecía que losgemelos se habían olvidado de la foto, solo me prestaban atención a mi. Era un poco incómodo tener los ojos de George sobre los míos ya que seguía encima mientras miraba el papel.
-Venga, ¿qué pone?-preguntó Ron
Abrí el papel...

domingo, 30 de junio de 2013

~Bienvenida, "chica nueva"~

Entramos en un vagón dónde se encontrabanuna chica de pelo largo rubia platino, un chico de pelo corto oscuro y una chica pelirroja.
-___ estos son Luna, Seamus y Ginny. Chicos esta es ___.
-Hola, encantada.-me senté al lado de Neville.
-¿Eres nueva?-preguntó Seamus
-Otro igual, no, no soy nueva-dije sentándome al lado de Luna.
-No te he visto nunca-dijo Luna con una voz tranquila.
-No suelo llamar la atención.
-Dirás solías, ahora vas a tener a todos los chicos de grifyndor detrás de tí. Empezando por Seamus-dijo mirando al chico que no me quitaba la vista de encima.
-Lo siento-dijo.
-¿Dónde estabas?-preguntó la pelirroja- Neville estaba preocupado, nos ha hablado tanto de ti... teníamos muchas ganas de conocerte.
-Estaba con los gemelos Weasley.
-Oh, mis hermanos... unos locos por la diversion.
-Me gusta como suena eso, diversion. Nunca he hecho algo divertido.
-¿Nunca?-preguntó Seamus asombrado.
-Nunca, lo único que hacía era estudiar.
-Que aburrida-dijo Seamus.
-¡Seamus!-dijo Neville.
-Tiene razón, pero este año va a cambiar todo, voy a pasarlo bien-sonreí.
-Ya era hora-dijo Neville
- ¿Y tu? ¿Que tal las vacaciones?-pregunté a Neville. Sabía que Neville iba a practicar algun hechizo como cada verano. No se le daban nada bien los hechizos.
-Bueno, digamos que no muy mal...
-¿No muy mal? ¿Que no muy mal? ¡Me salió ardiendo la ropa!-gritó Seamus.
-Eso fue un error tonto, no me ha vuelto a pasar.
-Porque no has vuelto a practicar-dejó caer Seamus suavemente.
-Hemos llegado-dijo Luna.
El tren paró. Cogimos nuestro equipaje y salimos del vagón.
-¡Harry!-gritó Neville.
Un chico de pelo negro, gafas y ojos azules se dio la vuelta y se acerco junto a un chico y una chica hacia donde estábamos.
-Neville, ¿qué tal todo amigo?-se abrazaron todos.
-Chicos quiero presentaros a alguien-Neville se acercó a mi.- Harry, Hermione, Ron, esta es ___, ___, estos son Ron, Harry y Hermione.
-Un gusto-dije
-Lo mismo digo-dijo la chica.
-No te he visto nunca por aquí-dijo Harry.
-Creo que te vi una vez en la biblioteca-dijo Ron. Creo que ese chico es hijo de Arthur, más que nada, es pelirrojo.
-Hermanito, ¿tu en la biblioteca?-dijo Ginny.
-Si, vale, suena raro, pero era el unico sitio que me faltaba por buscar a Hermione.
-Eso lo explica todo-dijo Seamus.
-Vamonos, no quiero que Flitwick me heche la bronca como el año pasado-dijo Ron
-¿Qué pasó el año pasado?-pregunté
-Se quedó dormido en el asiento-dijo Harry
-Si, intentamos despertarlo pero no fuimos capaz-continuó Hermione.
-Venga, vamos deprisa.
Nos pusimos a andar hasta estar dentro de la escuela. Subimos hasta las escaleras y nos despedimos de Luna. Subimos hasta nuestra sala. Allí dejamos las cosas y nos pusimos nuestras túnicas para bajar al comedor.

martes, 11 de junio de 2013

~Todo comienza ahora~

Esto es subrealista. Después de estar horas y horas en el tren, completamente sola, sí, sola, nadie se ha sentado en mi cabina, llegamos a Hogwarts. Es enorme. Sigo sin creerme que esto existe. Entramos en una sala enorme llena de velas flotantes y de estudiantes más mayores que nosotros.
-Queridos alumnos, damos la vienvenida a los nuevos estudiantes de Hogwarts. Y ahora, procedamos a seleccinar las casas. Profesora McGonagall...
Una mujer de avanzada edad colocó un sombrero sobre un taburete y empezó a leer una lista que llevaba en la mano.

Mi turno. Me senté en el taburete y me colocó el sombrero sobre la cabeza.
-¡Gryffindor!-todos aplaudieron.
Me dirigí hasta donde estaban todos los alumnos de esta.casa y me senté con ellos.

Durante toda la noche pude ver que habia cuatro casas. Esto es muy raro para mi. Pasaban unos cuantos fantasmas por encima de las mesas y saludaban a todos los alumnos de la escuela.

-Queridos alumnos, es hora de irse cada uno a su casa correspondiente. Los prefectos les llevarán a su sala común. Mañana las clases empiezan muy temprano. Buenas noches-el director se levantó y se fue.
Todos los presentes allí nos levantamos y fuimos detrás de nuestro prefecto.
-Tened cuidado con las escaleras, se mueven-dijo él.
Subimos todas las escaleras hasta el séptimo piso. Se paró enfrente de un cuadro.
-Detrás de este cuadro está vuestra sala común.
-Contraseña-dijo la sseñora gorda del cuadro.
-Sorbete de limón
El cuadro se abrío como una puerta dejándonos pasar a su interior.
-Chicas arriba a la izquierda, chicos arriba a la derecha. Los chicos no pueden entrar en el dormitorio de las chicas bajo ningún concepto. Que pasen buenas noches.
Se fue y después nos subimos cada uno a nuestro dormitorio.



DE SEPTIEMBRE DE 2001
Me desperté dando cabezazos como siempre y empecé a colocar las cosas en la maleta para empezar mi penúltimo curso en Hogwarts. Mi vida allí no es que haya sido la mejor. Llevo unos cuatro años allí y no he hecho ningún amigo todavía. Soy demasiado tímida y todos me miran como un bicho raro, claro, los que me miran, porque hay otros que nisiquiera me miran. Con el único chico que he hablado durante todos los cursos ha sido con Neville Longbottom. Es un buen chico. Aunque es un año menor que yo. Pero este curso va a ser diferente. He cambiado. Mi timidez no es la misma, este curso voy a pasarlo bien. Voy a hacer alguna travesura que he pensado durante estos años. Los de Slytherin no volverán a decirme nada de mal gusto. Voy más segura que nunca. Mi pelo ha cambiado. Sgue rizado  pero ya lo puedo domar. Mis gafas...han desaparecido. Gracias a una amiga de Neville, puedo ver sin ellas.
Cogí todas mis cosas y salí del hotel donde me alojaba. No he vuelto a ver a mi padrastro desde el día que le dejé. Estos años he estado trabajando en vacaciones para poder pagarme un hotel y vivir en él.
Cuando llegé a la estación con mi carrito lleno de cosas, coloqué mi varita (que años antes, Hagrid, el guardabosques, junto a otro chico de gafas redondas me acompañó a comprarla) en la bolsa de mano y atravesé la pared.
-¡Cuanto tiempo!-escuché una voz delante mía.
-Arthur-llevaba mucho tiempo sin verle
-¿Qué tal todo? ¿Te gusta la escuela?-me abrazó. Nos hemos puesto un par de veces en contacto por correo aéreo.
-Es genial. Gracias por todo lo que hiciste por mí aquel día.
-No tienes que darlas, fue un placer. Molly, esta es la chica de la que tanto te he hablado.
-Hola cariño-la mujer que estaba la otra vez en el andén me abrazó.
-Encantada señora Weasley
-Lo mismo digo...
-___.
-___-áfirmó
El tren sonó.
-Me voy ya. Un placer conocerla Molly, me alegro de verte Arthur-me despedí de ellos y entré en el tren.
Caminé por los pasillos. Ningún vagón vacío y no encontraba a Neville por ninguna parte. El último vagón que había estaba ocupado solo por los gemelos Weasleys.
-Perdón-me disculpé y me di la vuelta
-No importa, puede entrar, solo estamos nosotros tres-dijo uno de los gemelos.
-No, no quiero molestar-creo que más roja no podía estar.
-No molestas, pasa-dijo el otro.
-Gracias.
Entré y me senté en el mísmo asiento donde estaba uno de ellos pero en el lado de la puerta ya que él estaba en el lado de la ventana enfrente de su hermano.
Me puse a dibujar en la puerta de cristal sobre el vaho que había producido por el frío. Hasta que me sacaron de mis pensamientos.
-¿Eres nueva?-preugntó uno.
-No puede ser nueva, memo, en Hogwarts se empieza desde los 11-dijo el otro
-No, no soy nueva
-No recuerdo haberte visto por la escuela-dijo el que se sentaba junto a mí
-Suelo pasar mucho desapercibida
-Pues no entiendo porque-dijo el otro
Moví la cabeza de lado a lado y seguí con lo mío.
-¿Habéis visto a una chica de pelo extraño y gafas gruesas por aquí?-un chico entró por la puerta sin llamar. Levanté la vista.
-¡Neville!-me levanté y lo abracé
-¡___! ¡Cuanto has cambiado!
-Lo sé. Te estaba buscando pero no te encontraba.
-Me he retrasado un poco, lo siento. ¿Te vienes conmigo?
-Claro. Adiós-les dije a los pelirrojos que se encontraban en mi vagón.
-Adión -dijeron.
Yo abracé a Neville a causa del frío mientras caminabamos por los pasillos. 

sábado, 8 de junio de 2013

~Carta inesperada~


Vivo con mi padrastro en un pueblecito de Londres, Wolverhampton. Soy hija única, lo que no me gusta ya que todo lo malo me pasa a mí. Mis padres se divorciaron cuando yo tansolo tenía dos años. Mi madre volvió a casarse y mi padre murió tres años más tarde de forma trágica. Murió desangrado de una manera extraña en el salón de su casa. Mi madre también murio otros tres años más tarde, es decir, cuando yo tenía ocho años, dejándome sola con mi padrastro.
Mi padrastro, es el hombre más odioso del mundo. Desde que conoció a mi madre y se hizo parte de la familia, mi madre me trataba de lo peor y él también.

Ahora mísmo tengo 16 años. Soy de estatura media, con ojos café y pelo castaño rizado. Me considero una chica normal dentro de lo que cabe, si no fuera porque...


1 DE SEPTIEMBRE DE 1996. 11 años.
Sábado. Mi padrastro todavía no ha llegado a casa y me muero de hambre. Últimamente está muy raro. Sale poco y cada vez que llega el del correo sale corriéndo hasta la puerta para recibir las cartas. Escucho un ruido que viene desde la parte superior de la casa. No sé que hacer. Me armo de valentía y subo. No hay nada. Me hacerco hasta una pequeña ventana y miro por la ventana. Llueve. Veo venir algo volando velozmente y choca con la ventana a la que estoy asomada y cae.
-¿Pero qué?-me pregunto a mí misma.
Bajo hasta el patio donde se encuentra un ave en el suelo hecha una bola. Me pongo la capucha de la chaqueta que llevo puesta y salgo a por ella para entrarla en casa. Una vez dentro, la pongo encima de la mesa y le miro un poco la cabezita para ver si se ha hecho daño.
-Que bruta eres-me da un picotazo en la mano.- Perdón, que bruto eres. No tienes nada, pero te vendaré un poco por si acaso.
Cuando acabé de "curarla", salí de nuevo al patio y la solté, pero ella volvió hasta el lugar exácto en la que había caído.
-Vamos, vete-me acerqué de nuevo y vi una carta. "Estimada Srta.___, Hogwarts le da la bienvenida". ¿Hogwarts? ¿Qué es eso? La lechuza se fue. Entré en casa, me senté en el sofá y me puse a leer la carta hasta que llegase mi padrastro.
Mi padre me había contado alguna historia sobre este lugar cuando era pequeña, pero nunca imaginé que esto fuese real.

-Me voy-dije cuando entró por la puerta mientras yo bajaba mi maleta con mis cosas.
-¿A dónde te vas niñata?-dijo incrédulo.
-A Hogwarts-se sorprendió.
-¿De dónde has sacado tu eso?
Le mostré la carta.
-¡He estado semanas escondiendo todas estas cartas para que no fueras y ahora, por una hora que salgo una estúpida lechuza te da esto! ¡No te vas a ir!-estaba enfadado.
-¡Si me voy a ir! El tren sale en dos horas-salí corriéndo después de arrancárle la carta de las manos y me dirigí hacia la estación de tren.
Allí había mucha gente. 6, 7, 8, 9...10. No está. Seguí buscando y preguntando a gente que se reía de mí, no se si de mi aspecto o por preguntar por un andén que no exíste. Vi a un hombre de mediana edad, poco pelo pero el poco pelo que tenía lo llevaba pelirrojo, un poquito panzudo y con cara de ser gente amable. Me acerqué a él.
-Perdone...-se giró.
-Hola niña, dígame, ¿qué desea?-valla, era realmente amable.
-¿Podría decirme dónde se encuantra el andén 9y3/4?
-Claro, ¿va a Hogwarts?
-Sí...
-Yo me dirijo hasta ese andén, puede venir conmigo-me sonrió.
-Gracias.
-Me llamo Arthur, Arthur Weasley. ¿Y usted cómo se llama?
-___...
-Bonito nombre
Seguimos caminando hasta llegar a una pared en la que se puso enfrente.
-Hemos llegado.
¿Está de broma? Me miró.
-Oh, perdón. Si, es aquí. Hay que coger distancia para atravesarlo.
-¿A..travesarlo...?
-Si, atravesarlo.
Me gió hacia atrás y me enseñó como hacerlo. Cerré los ojos y atravesé la pared. Valla, no me he hecho nada... Segundos más tardes ya tenía a Arthur a mi lado.
-¿Tienes ya las cosas para ir a Hogwarts?
-No, no tengo nada. Me ha llegado la carta esta mañana...
-¿Cómo? Bueno, yo tengo algunas cosas que te pueden servir.
Empezó a sacar cosas de su bolsillo. Aluciné.
-Es un hechizo-me dijo- Ten, guardalas. Lo único que te falta es la varita, no te preocupes, seguro que Dumbeldor tiene algo para tí.
¿Dumbeldor? Supongo que ya me enteraré.
-Mira, allí está mi familia, ¿viene?
-No, gracias, creo que iré entrando en tren. Gracias por todo.
Me despedí de ély entré en un vagón vacío. Miré por la ventana y vi mi reflejo. Una chica de cabello bastante extraño y gafas gruesas con una sonrisa extraña. Moví la cabeza y me fijé en la gente que había fuera. Divisé a Arthur en el andén junto a su familia. Una señora bajita de pelo rizado pelirrojo, un chico también bajito pelirrojo, dos chicos un poco más altos pelirrojos y una chica de pelo liso también pelirrojo mucho más joven. Valla, la familia pelirroja, se nota que son felices. El tren emitió un ruido ensordecedory los dos chicos pelirrojos entraron en el tren. Arthur me vio y me saludó. Le sonreí y saludé con la mano. Su figura se iba alejando de mí.
Siento que esto va a ser el comienzo de algo......